"Los
migrantes son personas que eligen trasladarse de su país de origen a otro
principalmente para mejorar sus vidas, para encontrar trabajo mejores trabajos o
educación, por reunificación familiar, etc. Pero que siguen recibiendo la
protección de su gobierno o país de origen. Se les puede comparar con un hijo
que se va de la casa voluntariamente, pero que puede regresar cuando quiera.
El pueblo de Israel fue extranjero en Egipto. Noemí emigró
con su familia a Moab donde lo perdió todo (Ver libro de Ruth).. Los padres de
Cristo lo tuvieron que llevar a Egipto como refugiado huyendo de Herodes el
grande. Es decir, que hay muchos ejemplos Bíblicos de emigraciones.
En República Dominicana, según una encueta, la población
de inmigrantes y de descendientes de inmigrantes asciende a 768,783 personas,
representando esta cifra el 7.9 por ciento de la población total que vive en el
país.
La encuesta resaltó la presencia en el país de inmigrantes
de 60 países, teniendo la mayor presencia, Haití (668,145 Un 87%), Estados
Unidos (13,514 (Un 2%), España (6,720), Puerto Rico (4,416), Italia (4,040),
China (3,643), Francia (3,599), Venezuela (3,434), Cuba (3,145), Colombia
(2,738) y Alemania (1,792). Hay un porcentaje creciente de venezolanos y puertorriqueños.
Ciento sesenta países,
incluyendo la República Dominicana, una abrumadora mayoría entre las 194
naciones del conglomerado mundial, no conceden ciudadanía automática a los
hijos de inmigrantes ilegales, ningún Estado europeo consiente ese beneficio y
solo Estados Unidos y Canadá, del conjunto de las 31 economías más avanzadas de
la tierra, otorgan ese privilegio.
En el caso de la República
Dominicana, la Constitución proclamada el 26 de enero de 2010 establece, en el
numeral 3 del artículo 18, que la condición de ciudadanía la adquieren “Las
personas nacidas en territorio nacional, con excepción de los hijos e hijas de
extranjeros miembros de legaciones diplomáticas y consulares, de extranjeros
que se hallen en tránsito o residan ilegalmente en territorio dominicano.
PRINCIPIOS BIBLICOS A TOMAR EN CUENTA
SOBRE LA INMIGRACION.
1.
Dios no hace acepción
de personas. “Entonces
Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de
personas, sino que en toda nación se agrada del que le teme y
hace justicia.” (Hechos 10:34-35).
2.
Pero no olvidemos que
Dios es el creador de las razas, los idiomas y de las fronteras. “En ese entonces se
hablaba un solo idioma en toda la tierra. 2 Al emigrar al oriente, la
gente encontró una llanura en la región de Sinar, y allí se asentaron. Un día se dijeron unos a
otros: «Vamos a hacer ladrillos, y a cocerlos al fuego». Fue así como usaron
ladrillos en vez de piedras, y asfalto en vez de mezcla. Luego dijeron:
«Construyamos una ciudad con una torre que llegue hasta el cielo. De ese modo
nos haremos famosos y evitaremos ser dispersados por toda la tierra». Pero el Señor bajó para observar
la ciudad y la torre que los hombres estaban construyendo, y se dijo: «Todos forman
un solo pueblo y hablan un solo idioma; esto es solo el comienzo de sus obras,
y todo lo que se propongan lo podrán lograr. Será mejor que bajemos a
confundir su idioma, para que ya no se entiendan entre ellos mismos». De
esta manera el Señor los dispersó desde allí por toda la tierra, y por lo tanto
dejaron de construir la ciudad. Por eso a la ciudad se le
llamó Babel, porque fue allí donde el Señor confundió el idioma
de toda la gente de la tierra, y de donde los dispersó por todo el mundo. (Génesis 11:1-9). Esto nos recuerda que el Señor es el creador
de toda la raza humana y también el formador de los países y las fronteras. “De un solo hombre hizo todas las naciones para
que habitaran toda la tierra; y determinó los períodos de su historia y las
fronteras de sus territorios. Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y,
aunque sea a tientas, lo encuentren. En verdad, él no está lejos de ninguno de
nosotros, “puesto que en él
vivimos, nos movemos y existimos”” (Hechos 17:26-28).
3.
La Biblia no está de acuerdo con la inmigración ilegal ni con nada que
viole la ley. "Por causa del Señor someteos a
toda institución humana, ya sea al rey, como a superior, ya a los gobernadores,
como por él enviados para castigo de los malhechores y alabanza de los que
hacen bien. Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis
callar la ignorancia de los hombres insensatos; como libres, pero no como los
que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de
Dios" (1ª Pedro 2:13 – 16)
4.
Solo se nos autoriza violar las leyes civiles, cuando contradicen las
divinas (Hechos 5:29 “Es necesario obedecer a Dios
antes que a los hombres.”. En casos como cuando se nos prohíbe predicar el
evangelio.
5.
Por encima de los aspectos legales, todo inmigrante es un ser humano y
como ser humano merece y le debemos amor. “ Y amarás al Señor tu Dios con todo tu
corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus
fuerzas. Este es el principal mandamiento. Y el segundo es
semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento
mayor que éstos.” (Marcos
12:30-31). Debemos percibir
a Dios como el Padre de la raza humana y
el mundo como nuestra patria.
6.
Debe ser tratado con
justicia y respeto. “Pues el Señor tu Dios es Dios de
dioses y Señor de señores. Él es el gran Dios, poderoso e imponente, que no
muestra parcialidad y no acepta sobornos. Se
asegura que los huérfanos y las viudas reciban justicia. Les demuestra amor a
los extranjeros que viven en medio de ti y les da ropa y alimentos. Así que tú también tienes
que demostrar amor a los extranjeros porque tú mismo una vez fuiste extranjero
en la tierra de Egipto.” (Deuteronomio 10:17-19)… Porque tuve
hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui
forastero, y me recogisteis; Mateo 25:35