Jesucristo dijo en Juan 10:10 que él vino para que tengamos vida, y para que la tengamos en abundancia. He aquí 10 principios que nos pueden ayudar a vivir esa vida abundante que Cristo vino a traernos y de la cual muchos se privan por no dejarse guiar del Señor. Espero que usted haga la diferencia.
I- Tenga un correcto orden de prioridades – Haga de Dios lo más importante de su vida (Marcos 12:30). Dele a Dios y su reino la primacía y él se encargará de organizarle su vida (Mateo 6:33). Entienda que el sentido de la vida se encuentra no en hacer lo que nos gusta (Complacernos), sino en ejecutar los planes de Dios (Complacerlo a Él).
II- Cuide su actitud, porque más importante que los hechos es como usted reacciona ante ellos (2Corintios 12:7-10; Filipenses 3:10-13).
III- Viva un día a la vez (Mateo 6:34).
IV- Practique la gratitud y el contentamiento (Efesios 5:20; 1Timoteo 6:6,7). Esté satisfecho y agradecido con lo que tiene ahora (Hebreos 13:5)
V- Reconozca que el que está en control es Dios (Apocalipsis 19:6). Resista la tendencia común de querer todas las cosas a su manera. Sea flexible como un zapato viejo
VI- Recuerde que a los que aman a Dios, todas las cosas colaboran para su bien… (Romanos 8:28). (A veces, no conseguir lo que se desea es el mayor golpe de suerte).
VII- Cuide su cuerpo y su Salud (1Corintios 3:16,17). Su cuerpo es templo del Espíritu Santo, y mantenerlo saludable, aseado y bien arreglado le traerá muchas satisfacciones
VIII- Dedíquese a amar y servir a los demás (Marcos 12:31-32). Así no tendrá tiempo para deprimirse.
IX- No acepte la mediocridad como parte de su vida. Si por un tiempo tiene que soportar una situación inaceptable, sopórtela, pero manténgase en pie de lucha en su espíritu (2Corintios 4:7,8)
X- Descubra su don y desarróllelo (1Pedro 4:10,11). Esto dará sentido a su vida y gloria a Dios
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